martes, diciembre 12, 2006

Uno menos

Sí, por qué no reconocerlo, me alegré al conocer la muerte de Pinochet: La alegría puede más que el deseo de que fuera condenado en vida. Hubiera estado bien claro está, no me malinterpreten, hubiera sido lo justo...pero no desesperen, piensen que al fin y al cabo murió sabiendo que no era intocable (qué mejor escarmiento para un megalómano) y que sus días de impunidad pasaron a la Historia...
Me produce risa también, para qué negarlo, el patético circo montado por la cuadrilla pinochetista...ese nieto barbilampiño del dictador (un adolescente disfrazado de cadetillo al más puro estilo "Oficial y Caballero") justificando el genocidio perpetrado por su abuelo, hablando de marxismo, de guerra fría, pobre infeliz...esa viuda presumiendo de marido ejemplar...de traca.
El bochornoso a la par que casposo espectáculo también contó con una agresión a una periodista española (contando con la inestimable colaboración de la polícia chilena mirando para otro lado) acompañada de insultos varios hacia los españoles (ya se sabe, por aquello de Garzón). Desde este blog nuestro apoyo y admiración hacia María José Ramudo (hay que ver lo bien que aguanta el chaparrón la pobre).
En fin poco más que añadir, que me uno al brindis en la Puerta del Sol como si fuera un chileno más y que aprovecho la ocasión para recordar a todos esos que este palurdo nos arrancó de este mundo: El gran Víctor Jara, Salvador Allende y tantas otras víctimas anónimas...estamos de enhorabuena: ha caído otro, uno menos...

Foto por cortesía de Un Lugar en el Mundo




2 comentarios:

Suzanne dijo...

No tengo ni que decir que el resto de los componentes de este blog está de acuerdo con lo que ha publicado el gran Accatone

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.