martes, mayo 15, 2007

Cuando la tristeza embarca en una patera

Miles de miradas ausentes

Mis ojos están cansados
Mis manos están sucias
Mi mente está tan vacía

No me quites lo poco que me queda

Foto: elpais.com


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Pero por desgracia lo poco que les queda si se lo quitan, o diría más, se lo quitamos...

Y que le llamen "problema de la inmigración" me saca de quicio...

Muy buen post!

bicos!

Accatone dijo...

En relación a este post recomiendo In this world, la película de M. Winterbottom.
No salen pateras, pero el drama humano, que es de lo que se trata, está presente...

Anónimo dijo...

Este tema me toca, me toca mucho. Vivo en Gran Canaria, un errático destino para los muchos que quieren llegar a Europa. Se presentan con frío, ojos rojos, y una piel azotada por un sol y un mar que despiadado les hace navegar a la deriva de su destino.
Gracias por recordarlo, porque parece que el ser humano se acostumbra rápido a las desgracias ajenas.
No olvidemos.
Quique González... acertado Suzanne.
Un beso